Hace más de seis meses que no escuchamos en los diarios, noticieros, páginas web, otro tema diferente al COVID-19. Un virus que, a la vista, llegó a hacer parte de nuestro diario vivir y aún cuando en algunos países del mundo se ha logrado contrarrestar la propagación del virus, en otros, como en Colombia, sigue tomando fuerza.
Los esfuerzos de las autoridades locales y organismos salud en el territorio nacional, continúan su arduo trabajo en concientizar a los ciudadanos de los mínimos cuidados que deben tener para evitar la expansión del COVID-19 y salvaguardar su salud personal.
Desde el uso del tapabocas, hasta la higiene constante de nuestras manos y mantener el distanciamiento social, al menos, un metro entre un individuo u otro, han sido las medidas más reiteradas, precisamente, para cuidar de nuestras vidas y la de nuestras familias.
Eventualmente se ha realizado una apertura económica el país en la que diversas empresas han adecuado sus espacios, además del horario de trabajo, para continuar con el curso normal de sus actividades y minimizar el número de contagios de sus empleados.
Estas empresas operan bajo los protocolos de bioseguridad dispuestos por las autoridades y al que deben acogerse para continuar con la realización de su actividad económica.
Ya son miles de colombianos que se han reintegrado a sus puestos de trabajo y otros tantos aguardan en sus hogares para el momento en que sean reactivados otros sectores económicos, volver a sus sitios de trabajo o bien, continuar en la modalidad de trabajo desde casa.
No es momento de bajar la guardia y minimizar los cuidados. Hoy más que nunca debemos ser conscientes e interiorizar las medidas preventivas para garantizar nuestra salud y la de nuestros seres queridos.